«En la industria o los servicios, la robótica ha dejado de ser ciencia ficción y es una realidad», apunta el catedrático.
Fernando Torres no duda que dentro de 50 años todos los hogares tendrán un robot. Mientras, la tecnología de la robótica avanza con el enorme lastre de la crisis y los elevados costes que implica.
La robótica industrial es una realidad hace años y hay aplicaciones muy desarrolladas. Hay otras parcelas que empiezan a serlo en cuanto a transferencia de tecnología, como la rehabilitación médica, teleoperaciones. En cambio, si pensamos en robótica como lo hemos visto en las películas, con máquinas muy similares a seres inteligentes, estamos aún muy lejos, aunque algún día tendremos algo parecido. Uno de los grandes avances es que hemos pasado de una etapa en la que programabas el robot para que hiciera algo a que ahora el robot, a través de diferentes sensores, obtiene información del entorno y reacciona en función de esta información, con unos parámetros de una cierta inteligencia.
¿En qué terrenos son más prometedores los avances en robótica?
En utilizar a los robots como esqueleto, una estructura externa al cuerpo humano para ayudar a quienes tienen alguna discapacidad a tener ciertos movimientos. También son espectaculares los temas de la manipulación. Poder hacer unas prótesis que hagan determinados movimientos controlados con una interfaz con el humano a través del habla o de una conexión nerviosa con el cuerpo. También es prometedora la robótica social, determinadas mascotas que puedan hacer compañía a personas que necesiten atención…
¿Cómo les está afectando la crisis?
La robótica es una tecnología cara eso se nota, aunque implantar un robot en una empresa es igual de caro antes que ahora. Está más madura a nivel de conocimientos, de empresas que pueden facilitar servicios. Sin embargo,no está lo suficientemente explotada para que los precios bajen y podamos tener todos un robot en nuestra casa. Pero pasará como con los ordenadores, que al principio eran caros, pero luego todo el mundo tuvo uno. en En el futuro habrá un robot en cada casa, aunque no me atrevería a decir qué funciones realizaría, limpieza, vigilancia, ayuda…
¿Están teniendo que marcharse las jóvenes promesas de la robótica española al extranjero?
Por desgracia sí. En nuestro país ha habido poco desarrollo en robótica. A nivel de diseño y fabricación de robots no hemos destacado nunca y las personas que se forman en esto se están teniendo que ir al extranjero, reclamados por países como Francia y Alemania.
«En la industria o los servicios, la robótica ha dejado de ser ciencia ficción y es una realidad»