El reciclaje de residuos electrónicos (E-Waste) es actualmente la mayor amenaza para el planeta, según la Fundación Global de Reciclaje.
De hecho, las Naciones Unidas advirtieron recientemente que los residuos electrónicos se consideran el «flujo de residuos de más rápido crecimiento en el mundo»; en realidad estamos hablando de unos 53 millones de toneladas al año (según el informe Global E-waste Monitor 2020 de la UNU, en 2019), que aumentarán considerablemente en los próximos años, incluyendo componentes tóxicos y residuos peligrosos si no se reciclan adecuadamente.
El reciclaje de los RAEE es un proceso que requiere mucho tiempo y esfuerzo, debido a la variedad de aparatos que hay que reciclar y a los diferentes componentes y materiales de los que están hechos. Ante esta realidad, las industrias no podemos quedarnos al margen.
Robotnik quiere ser parte de la solución y por ello, participamos en HR-RECYCLER, un proyecto multidisciplinar que pretende mejorar la capacidad de reciclaje de los países europeos.
Colaboración humano-robot en el proceso de reciclaje de RAEE.
Una cuestión clave en los procesos de reciclaje es el recorrido de los materiales y componentes en bruto y desmontados en la planta de reciclaje. Se trata de un proceso que consume recursos, ya que los materiales y componentes se procesan en varias partes de la fábrica. En un proceso de reciclaje tipo, los dispositivos sin clasificar llegan a la planta de reciclaje en grandes camiones. Después de la clasificación, cada dispositivo tiene que ser transportado a su estación de reciclaje, donde se separa en sus componentes. Los componentes pueden separarse aún más o estar listos para ser trasladados a su destino final.
Aquí es donde entra en juego Robotnik. El transporte de materiales dentro de una fábrica tiene que hacerse de forma asequible, eficiente y segura. Además, con la llegada de la cuarta revolución industrial, los robots móviles tienen que ser capaces de operar en colaboración con los humanos, compartiendo espacio.
¿Cómo hacerlo asequible?
La asequibilidad se consigue proporcionando un robot móvil capaz de transportar las mismas cestas o cajas que ya tiene la fábrica, lo que reduce el número de cambios que hay que hacer en la fábrica.
¿Cómo hacer que sea realmente eficiente?
La eficiencia se consigue mediante algoritmos de navegación de última generación, así como algoritmos de planificación de la fábrica en general
La colaboración se consigue mediante el uso de la navegación con conciencia humana, pero también aumentando la comunicación entre el robot y el humano sobre los objetivos del robot.
La seguridad se consigue mediante la aplicación de medidas estrictas, sensores y actuadores que cumplen las últimas normas de seguridad.
Todo este esfuerzo lo dirige Robotnik hacia la creación de un nuevo robot: RB-ARES. Robotnik ha desarrollado una solución fiable que integra robots, sistemas de localización, herramientas de configuración y programación (HMI) y sistema de gestión de flotas (FMS). Estos conocimientos se integrarán en el nuevo RB-ARES, que es capaz de transportar hasta 1.500 Kg. de carga y realizar una navegación completamente autónoma.
Aplicación del robot RB-ARES en el reciclaje.
El objetivo de RB-ARES será recoger y colocar los palés EURO a nivel del suelo y dirigirlos a través de la fábrica con las características requeridas de asequibilidad, eficiencia, seguridad y colaboración con las personas. Para cumplir esta misión, RB-ARES está equipado con actuadores y sensores de última generación.
RB-ARES funciona con ROS, así como con la tecnología propia de Robotnik para la navegación, la localización e interacción hombre-máquina, lo que permite una fácil configuración, programación e integración del robot en diferentes aplicaciones y sistemas de gestión de flotas, como exige la Industria 4.0. Ésta es la principal característica de los robots móviles colaborativos como RB-ARES, un robot móvil inteligente que asiste a los humanos en un espacio de trabajo compartido y apoya la optimización de los procesos dentro de la industria.
[1] Foro Económico Mundial. (2019). Una nueva visión circular para la electrónica: Time for a Global Reboot, (enero), 24.